Penas que abrigan, es un libro único, pues reúne dos características especiales: por un lado, aborda los sentimientos, particularmente la tristeza, que pueden experimentar niños y niñas pequeños y, por otro, posee una estética original que permite relatar la historia junto a la proyección de imágenes en la pared ─al estilo de sombras chinas─ con una pequeña linterna que viene con el libro. Se tuvo que probar un sistema de impresión nuevo en Chile, sobre mica transparente, para producir ese efecto.
De la autora Marion Acuña, joven profesora básica y artista de la ciudad de Valparaíso, Penas que abrigan relata la historia de Valentín, un niño que por alguna razón está triste y que sigue los consejos de su abuela para, tal como con los ovillos de lana, desenmarañar poco a poco sus lágrimas. La metáfora de las madejas de lana adentra en un tema necesario, pero poco común, la alfabetización emocional, que lentamente se va posicionando en educación dada su contribución al desarrollo emocional y cognitivo, más aún ahora en que los tiempos de pandemia han ameritado un mejor manejo de las emociones y contener los sentimientos de niños y niñas y también de adultos.
Penas que abrigan no sólo es una experiencia infantil. Si bien está dirigido a niños y niñas pequeños y fue concebido como material pedagógico para el aula, el libro viene con una linterna que debe ser utilizada por el adulto mediador de la lectura para proyectar láminas en la pared. Cada lámina acompaña parte del relato, lo que permite a los niños y niñas ir viviendo cada momento de la historia de tal modo de generar una experiencia que los hace parte del espacio del relato. A los adultos ese efecto los conmueve y adentra también a una segunda etapa que genera el libro, pues es tanta su provocación, que aparecen nuevos relatos y sombras chinas, esta vez inventadas por los propios lectores.
De este modo, este texto es un recurso que no acaba en sí mismo, ya que no termina con la lectura y la observación de cada imagen: también sirve para que en el aula o el hogar se instale la conversación sobre las emociones, siempre en un ambiente de acogida, compresión, libertad y de no represión.
El duelo y la pérdida de un ser ciertamente resulta un hecho doloroso, aunque también es cierto que la muerte es ineludible en la vida y que niños y niñas son conscientes de este hecho. Los sicólogos suelen señalar frente a este tema que es mejor hablar con verdad, adaptando el mensaje a la edad y desarrollo de cada niño o niña, pero definitivamente sin rodeos y de manera comprensible para ellos.
Cuentos de duelo, de la sicóloga Rocío Manosalva, apunta justamente a esa dirección, a hablar del sentimiento de la pérdida con honestidad y sencillez. Publicado por Ediciones de la JUNJI en 2020, en pleno contexto de pandemia y confinamiento, el libro nace para explicar a niños y niñas pequeños que durante el transcurso de la vida puede haber situaciones que impliquen una pérdida, pero que el duelo que ello implique puede superarse partiendo por reconocer en uno mismo la tristeza.
Se trata del relato de tres cuentos, Una pena pesada, La elefanta Elena y su abuelita Anita y Un gran amigo, que narran experiencias comúnmente presentes en la infancia cuyo aporte más valioso es enseñar a niños y niñas a manifestar sus emociones.
La lectura contenida que se haga de los tres relatos acompañará la educación emocional que los adultos puedan otorgar a niños y niñas, para que ellos y ellas, como con cualquier otro sentimiento, sepan reconocer, validar, canalizar y sobreponerse al desánimo.
Apoyando a los niños y niñas pequeños a enfrentar los cambios y Hablando sobre el coronavirus son dos publicaciones digitales de autoría del Fondo de las Naciones Unidas (UNICEF) que la JUNJI editó en 2020 para sus jardines infantiles y familias apoderadas con el fin de orientar a padres, madres y otros cuidadores en general en pandemia.
Paralelamente, ambas publicaciones que fueron traducidas al aymara, mapudungun y rapanui, fueron difundidas ampliamente por UNICEF con el propósito de hacerlas conocidas entre las comunidades y trabajadores del ámbito de la salud y la educación, así como entre todos los adultos responsables de niños y niñas pequeños.
Este material pretende servir como guía para hablar sobre el coronavirus de manera sencilla, clara y tranquilizadora y para abordar las emociones que puedan estar sintiendo los niños y niñas en la primera infancia. En este sentido, frente a los cambios repentinos que ha ocasionado la pandemia, los textos apuntan a ayudar a los adultos a explicar lo que está pasando y a contener en la emocionalidad, transmitiendo a los niños el mensaje de que “las personas que te cuidan te mantendrán seguro y protegido”.
Estar atentos a problemas de sueño, como despertar más seguido o dormir menos, disminución en las ganas de comer y de la irritabilidad, son situaciones a las que se llama a prestar atención y enfrentar creando ambientes calmos, dando espacios y tiempos para el diálogo, explicando lo que sucede, conteniendo, manejando amorosamente llantos y rabietas, ayudando a los niños a “traducir” lo que sienten. Sin duda, ambas publicaciones resultan un aporte de UNICEF en estos tiempos.
