En esta experiencia pedagógica mostramos cómo la Sala Cuna Añañucas, ubicada en la desértica comuna de Copiapó en el norte de Chile, se ha volcado a innovar en su práctica educativa para que los lactantes experimenten interacciones positivas y de calidad. El equipo educativo liderado por Marta Orellana se ha desafiado a sí mismo para actualizar sus conocimientos y cambiar muchos de sus quehaceres a favor de ser adultos más sensibles y afectuosos con los bebés que asisten. Basados en los principios de la Pedagogía del Amor y el enfoque de Emi Pikler, cada momento de la rutina diaria en este espacio educativo se transforma en algo especial y significativo para los niños y niñas.