Cabrero, (@JUNJI_Biobio). Más de 20 niños y niñas del Jardín Infantil Alternativo “Nube Luz”, ubicado en el sector Charrúa de la comuna de Cabrero, disfrutaron de la nueva sala de psicomotricidad denominada “Sala Feliz”.
El nuevo espacio educativo se pudo construir gracias al aporte de la empresa Inkia Energy, que a través de su política de responsabilidad social, enfocado en el área del voluntariado corporativo de Central Yungay, elaboraron un proyecto en conjunto con el equipo educativo del jardín infantil, con el fin de contribuir con el desarrollo de los 18 niños y niñas que actualmente asisten al establecimiento.
El objetivo de esta iniciativa es ofrecer nuevas oportunidades de aprendizaje a los niños y niñas con el propósito de potenciar su desarrollo de la autonomía, la percepción adecuada de su corporalidad y la expansión de diferentes habilidades mediante el juego.
Matías Eyzaguirre, coordinador de comunidades y participación ciudadana de Inkia Energy, señaló que en la empresa financia actividades de diferentes áreas, pero en este caso privilegiaron este asociado a la educación. “Para nosotros es un tremendo proyecto, porque la educación para nosotros es fundamental, lo que le podemos entregar hoy a los niños y niñas va a ser lo que ellos le entregarán al país el día de mañana”, enfatizó.
Por su parte, Soledad Pérez, encargada del Jardín Infantil “Nube Luz”, dijo: “Estamos muy agradecidas, ya que esta sala de psicomotricidad va a permitir desarrollar nuevos aprendizajes a los párvulos. Además es muy significativo, ya que la idea se trabajó con las familias, quienes seleccionaron la opción de crear este nuevo espacio educativo”.
La nueva sala de psicomotricidad, tiene alrededor de 28 metros cuadrados y está completamente equipada con centros de estimulación de diferentes dimensiones y colores que despiertan el interés innato de los niños y niñas.
“Estoy muy contenta porque mi hija y sus compañeros ahora tienen un lugar seguro donde jugar y aprender. A ella le gusta venir al jardín y ahora estará más motivada”, indicó Paola Aguilera, apoderada y mamá de Giuliana.
Anahí Hinojosa, también apoderada, agregó que “estamos contentos porque mi hija y sus amigos se ven beneficiados en muchos aspectos, especialmente en la actividad física que ahora van a poder desarrollar de mejor manera”.