Concepción, (@JUNJI_Biobio). En la primera infancia, el desarrollo integral de niños y niñas se favorece a partir de la diversidad y la riqueza de las experiencias que se proveen a los párvulos. Las vacaciones son un periodo importante para los niños y las niñas, ya que, es un momento del año en el que las familias pueden proveer interacciones favorables en mayor medida, por cuanto existe el tiempo para jugar, escucharse, compartir relatos y recibir el afecto que ellos y ellas tanto necesitan.
Adicionalmente sabemos que contar con espacios de autocuidado y descanso favorece el bienestar de las y los adultos que cuidan a los niños y las niñas. De ahí que, desde Junji Biobío, la Unidad de Buen Trato perteneciente a la Subdirección de Calidad Educativa elaboró una serie de consejos para incentivar los ambientes bien tratantes.
Ante esto la sicóloga y encargada de la Unidad, Paula Pizarro, explicó que: “Es relevante mostrar a los adultos y adultas que este periodo es una oportunidad para estrechar vínculos con nuestros niños y niñas, disfrutar de su compañía y realizar actividades que favorecen sus aprendizajes. Los entornos naturales, los espacios de juego y muchos otros contextos son ideales para esto, gozando de todo lo bueno que trae consigo criar y cuidar de un párvulo”.
Añadió que “desde la mirada adulta, solemos pensar que las vacaciones son en lugares novedosos y que sólo ahí podremos descansar y tener las nuevas experiencias que se precisan. No obstante, en la primera infancia los descubrimientos son múltiples, por lo que pueden existir experiencias tan o más enriquecedoras en el hogar, siempre y cuando consideramos la intencionalidad de estas y el interés de los niños y las niñas. Cuando vemos que, a un hijo, un nieto o un sobrino le da curiosidad un juego o una situación es relevante que nos detengamos en aquello que conlleva un goce o curiosidad y podamos aprovechar esto como una oportunidad de interacción y aprendizaje”.
Panoramas familiares
La mayor fuente de diversión para los niños y las niñas no son las grandes salidas ni mucho menos las pantallas de celulares o televisión, asegura la profesional, sino que son sus propios adultos significativos y las experiencias que con ellos y ellas realicen. Estas serán las memorias que atesoren en el devenir de sus vidas.
Por ello recomienda que es relevante que en estas actividades transmitamos a los párvulos la noción de estar siendo vistos, atendidos y comprendidos por el adulto o adulta, por ello, para elegir la actividad, debemos conocer a nuestro niño o niña con sus particularidades y también en consideración de su etapa del desarrollo.
Insistió en que en la página web de Junji existe una sección denominada “Del jardín a la casa”, en la que es posible revisar múltiples actividades para realizar en el hogar y ver cuáles son del interés de los niños y las niñas.