Rancagua, (@JUNJI_Ohiggins). Haití, Ecuador, Chile, Perú, Bolivia, Paraguay, Venezuela y Colombia fueron los ocho países que estuvieron representados en el 4° Encuentro Multicultural organizado por el Jardín Infantil “Pulgarcito” y que, anualmente, busca dar un espacio para que las diversas culturas que conviven en la unidad educativa puedan mostrar parte de lo que los caracteriza.
“Cada una de las familias es muy importante para nosotros, porque son ellos quienes le dan vida a nuestro jardín, por lo tanto no sólo queremos que se integren a la comunidad, sino que se sientan parte de ella. Eso es lo que pretende este encuentro, rescatar las raíces de todos los países que nos conforman y brindar un espacio para que puedan compartir sus riquezas”, afirmó Mónica Muñoz, directora de la unidad educativa.
La ceremonia comenzó con representantes de cada nación desfilando con su bandera ante el público asistente, para luego dar paso a bailes típicos de cada nación. Incluso, Ecuador, representó con música su rito típico de matrimonio. Las familias junto a niños y niñas participaron de la actividad con muchísimo entusiasmo, todo acompañado por el equipo de educadoras y técnicos, que amenizaron el encuentro con bailes.
Participación transversal de toda la unidad educativa cada país contó con su barra propia y entre los asistentes se podía ver la emoción de las 23 familias extranjeras que son parte de esta comunidad y que con esta actividad pudieron sentirse un poco más cerca de sus países de origen.
“Es increíble que ocho países convivan a diario en un jardín infantil, ocho culturas y realidades tan diversas que se encuentran en este espacio educativo, donde niñas y niños encuentran sus primeras lecciones, donde sientan las bases de cómo se construye comunidad. Esto es muy enriquecedor tanto para ellos como para los adultos, todos podemos aprovechar y empaparnos de esta diversidad”, afirmó el director regional(s), Fernando Robles.
Luego de la ceremonia, la extensa entrada del establecimiento se llenó de sabores, con los stands que las familias prepararon para compartir algunos platos típicos de los países que forman parte de esta comunidad educativa. Un cierre delicioso para una jornada que estuvo colmada de ritmo, sabor y emociones.
