Temuco, (@Junji_LaAraucanía). En dependencias del SENADIS se realizó la jornada de cierre anual del “Programa de Atención Temprana para Niños y Niñas en Situación de Discapacidad y/o Rezago en el Desarrollo”, el cual tuvo una evaluación exitosa por parte de los ocho equipos educativos de los jardines infantiles Junji que fueron beneficiados durante el 2019, donde se apoyó la inclusión social de 33 párvulos.
Durante la actividad, donde estuvieron presentes las autoridades de ambas instituciones, se destacó la iniciativa por ser un trabajo colaborativo y articulado, cuyo foco principal es poder contribuir a la inclusión y equiparación de oportunidades de niños y niñas menores de seis años en situación de discapacidad y/o rezago del desarrollo, que asisten a establecimientos de educación inicial de la Junji. Es así, que durante 2019 benefició a establecimientos de las comunas de Freire, Cholchol, Victoria, Lonquimay, Curacautín, Angol, Melipeuco y Carahue.
El director regional de Junji Araucanía, Juan Pablo Orlandini, señaló que “para nosotros es fundamental este convenio por el trabajo que se realizó al interior de los jardines infantiles. Podemos destacar que hay duplas de profesionales que trabajan en los jardines y son quienes asisten de manera itinerante para eliminar barreras de aprendizajes y de participación«.
Con respecto al rol de las familias manifestó que, “no sacamos nada si solo hacemos un trabajo con los equipos educativos, sin incorporar a las familias en este trabajo que se sigue realizando en los hogares para que al final del día promueva: el respeto, la diversidad, la integración, la aceptación que es la base del amor y bienestar para los niños y niñas de todos los jardines infantiles”.
El programa buscó, a través de procesos de formación y apoyo continuo, incorporar de forma gradual el modelo de educación inclusiva en contextos de educación parvularia, con el objetivo de reducir barreras y promover la participación, el aprendizaje y el juego de niños y niñas de 0 a 6 años. En este contexto, el director regional de Senadis, Mario Oyarzún Contreras, relevó que “hay un ámbito tremendamente importante para nosotros, que es la educación y aquí se enmarca este programa de educación temprana, donde el Servicio Nacional de la Discapacidad financia, en este caso a JUNJI, con una cantidad anual de casi 27 millones de pesos para beneficio de niños y niñas. Lo cual va en beneficio a ocho comunas de la región y al hacer un análisis de los jardines infantiles que son beneficiados, estamos hablando que la distribución es bastante equilibrada entre las provincias de Cautín y Malleco”.
Experiencias en los Jardines infantiles
Por su parte, Vicky Mora Cornejo, Encargada del Jardín Infantil “Mágicas Mutillas” de la localidad de Trovolhue en Carahue, destacó que “en el jardín infantil tenemos dos casos especiales; un niño con síndrome de West y otro párvulo con Ataxia. Se hizo un trabajo enriquecedor para los niños en su desarrollo integral y también se trabajó en conjunto con las familias. Esto fue de gran importancia para el equipo educativo, porque se abrió una mirada hacia la inclusión. Nosotros sabemos que tenemos que trabajar el diseño universal de aprendizaje, pero nos faltaban ciertos consejos o ideas para conocer aún más las barreras de aprendizaje”.
