Chillán, (@JUNJI_Nuble). En el marco de las inspecciones que se han realizado en la región de Ñuble, el director regional de la Junji, David Cid, visitó el Jardín Infantil “Bamby” junto al seremi de Energía, Enrique Rivas.

En la actividad se demostró el buen mantenimiento que tienen los establecimientos de educación inicial de la institución, así lo confirmó la máxima autoridad regional de la SEC quien declaró que se está en proceso de actualización de los sellos verdes, y que el lugar no contaba con fugas de gas o instalaciones irregulares.

David Cid, aseguró que en muchos casos los jardines son administrados por terceros, por lo que es a ellos a quien le corresponde la mantención del establecimiento, sin embargo, comprometió todo el apoyo y coordinación con la SEC y la Seremi de Energía para resguardar la seguridad de los niños.

“Nosotros en los jardines que tenemos como administración directa no hemos tenido problemas de fugas de gas ni nada por el estilo, los problemas que se presentan en otros establecimientos han ocurrido principalmente porque se realizan instalaciones propias que alteran la infraestructura, cosa que no debe ocurrir”, indicó.

Y agregó que “nosotros queremos incentivar a los jardines, a que las medidas de seguridad que tienen con el tema del gas sean óptimas, sobre todo en este tiempo de invierno donde se usa más este recurso”.

El Sello Verde es una certificación que indica que la instalación interior de gas del recinto se encuentra bien operacionalmente y está apta para funcionar de manera segura, cumpliendo con la normativa vigente, la cual debe renovarse cada dos años.

El seremi de Energía valoró la disposición de la Junji Ñuble para trabajar en lo del Sello Verde y aseguró que se están coordinando todos los esfuerzos para regularizar todas las situaciones que se presenten en los jardines infantiles.

“Vamos a seguir fiscalizando y poniéndonos firmes con este tema, no solo en jardines infantiles, sino que también en edificios públicos y locales comerciales”, finalizó el Seremi.

Según indica la normativa, los establecimientos que no tengan su Sello Verde pueden seguir funcionando con sello amarillo (es decir con observaciones), pero tienen la obligación de subsanar en su totalidad las fallas que fueron identificadas por los expertos. Si esto no se cumple a la brevedad el recinto arriesga multas e incluso la clausura del lugar.